Cheesecake de Platano y Baileys con Chocolate

Tengo una amiga a la que le encanta el Baileys. Y tenía tres plátanos muriéndose de risa en el frutero. Momento ¡Clic! Encendióseme la bombilla (sé que está mal dicho, pero me divierte lenguarme la traba). En realidad esta receta es anterior a la del Cheesecake Clásico que os puse hace dos semanas. Pero preferí publicar la otra primero.

La tarta sola, sin la crema de encima, está muy buena. Pero añadirle el ganache de chocolate y Baileys es mucho más perverso. Sobre todo porque será de las pocas tartas que yo no comeré (no me gusta nada el Baileys). ¡Ale! Engordad vosotros, jejeje.

Para un molde desmontable de 28cm

Para la base:

320gr galletas tipo Digesta (22unid.)

160gr mantequilla

3cucharaditas de azúcar moreno

Para el relleno:

600gr queso cremoso

125gr azúcar moreno

5 huevos L

3 plátanos muy maduros

2 cucharadas de harina

50gr de Baileys

En primer lugar, se pone el horno a precalentar a 180º con calor arriba y abajo. Se trituran las galletas con el método que más os guste (a mazazos o a máquina). Se derrite la mantequilla y se mezcla con la galleta. Se añaden las tres cucharaditas de azúcar y forramos nuestro molde. Veréis que yo pongo el doble de cantidad que otras recetas. Es porque me gusta forrar las paredes laterales y no sólo el fondo. Hay quien lo deja enfriar media hora en nevera. Y quien los hornea 10 min para que endurezca. Yo no hago ni lo uno ni lo otro. Cubro el molde y paso a forrarlo. Primero le plastifico bien la base con film transparente. Y después pongo doble capa de papel de aluminio. Es para evitar que se meta el agua del baño maría y nos fastidie la base de galleta.

Vamos con el relleno. Ponemos en el bol de la batidora los plátanos machacados. Añadimos el azúcar moreno y batimos hasta que se mezclen. Turno del queso cremoso, a batir más. Mientras, le añadimos los huevos uno a uno. Y por último las dos cucharadas de harina y el licor. Vertemos la mezcla a nuestro molde forrado y lo metemos al baño maría al horno a 180º con calor arriba y abajo. Entre 1 hora o 1 hora y cuarto. Hasta que veáis que el centro esté cuajado.

Sacamos el molde del agua, quitamos el film y el aluminio y dejamos que se enfríe sobre una rejilla un par de horas. Después lo dejamos un mínimo de 4 horas en la nevera. Mientras, haremos la crema.

Ganache de Chocolate y Baileys

250gr chocolate Negro

200gr nata 35% M.G

75gr Baileys

5ogr mantequilla

Ponemos la nata a calentar en un cazo. Cuando esté a punto de hervir, añadimos el chocolate y el Baileys. Por último, la mantequilla. Removemos bien hasta que se mezcle todo. Tapamos con film y dejamos que se enfríe por completo.

Una hora antes de ir a comer la tarta, la sacaremos de la nevera para que se atempere. Y batiremos en la máquina el ganache para que esté suave y cremoso. Lo extenderemos con una espátula sobre la tarta dejando piquitos. ¡Acabado fácil ,rápido y rústico!

Y ya está lista la tarta. Es casi un dos en uno, porque al llevar licor es como si nos tomáramos un chupito.

Ni que decir, que no es apta para menores de edad.¡Bon appetit!

 

 

All American Apple Pie y Segundo Cumpleblog!

¿Sabéis que día es hoy?

¡Es el segundo aniversario del blog!

Dos años compartiendo mis recetas con vosotros. Y aunque es un sacrificio el tiempo que hay que dedicarle, lo hago a gusto. Me gusta hacer repostería, me gusta comerla y me gusta picaros el gusanillo de hacerla. Un caprichito semanal que no tiene por qué estar reñido con la dieta. Sólo es cuestión de no tirarse tres días comiendo. Así que si sois pocos en casa, adaptad las recetas a moldes más pequeños o compartir vuestros dulces con los vecinos.

¡La receta de hoy esta buenísimaaa! ¡Sí, ya sé que siempre os digo lo mismo! Pero es cierto, ha gustado a los menos golosos de la familia. No sé qué tiene la manzana, pero es la estrella de los postres. Y estreno mi molde nuevo de Le Creuset. Un autoregalo por mi cumpleblog jeje

Para un molde de 28cm necesitamos: (salen unas 12 raciones)

Pasta quebrada (podéis comprar 2 láminas, pero no sabrá igual de rica)
600gr harina
300gr mantequilla fría
100gr azúcar glass
2 huevos L
un pellizco de sal

Primero se mezcla la harina, la sal y el azúcar. Y después se añade la mantequilla fría en daditos. Cuando tengamos una especie de migas, echaremos los huevos un poco batidos. Y amasaremos hasta que tengamos una bola homogénea. Si nuestro reloj nos los permite, la dejaremos tapada con film en la nevera 30 min. Si no, directamente la dividimos en dos bolas. Estiramos cada bola entre dos papeles de hornear y forramos nuestro molde con una de las láminas. Recortamos el sobrante y lo reservamos para la decoración final. La otra lámina es para cubrir por encima del relleno. Precalentamos el horno a 200º (esta vez he usado el ventilador, pero creo que es mejor poner el calor arriba y abajo).


Relleno:
1kg de manzanas
1 cucharada de zumo de limón
60gr azúcar moreno
20gr mantequilla derretida
1 cucharadita y media de canela en polvo
1/8 de cucharadita de nuez moscada
1 huevo y 2 cucharadas de nata, para pintar
1 cucharada de azúcar normal y ¼ de cucharadita de canela, para espolvorear

Pelamos las manzanas lo más rápido que podamos y las vamos sumergiendo en un bol con agua y limón. Cortamos las manzanas en cuartos y hacemos láminas de medio centímetro. Ahora las colocamos en un bol vacío. Las rociamos con la cucharada de zumo,que viene a ser medio limón pequeño. Añadimos la mantequilla derretida,el azúcar moreno, la canela y la nuez moscada. Y removemos todo con las manos. ¡Ya veréis qué bien huele mientras lo mezcláis! Echamos la mezcla en nuestro molde forrado.

  Y terminamos cubriéndolo con la otra lámina de masa. Volvemos a recortar el sobrante. Lo mezclamos con el de antes y lo utilizamos para decorar. Podéis hacer unos bordes tipo trenza,o churritos enrollados como he hecho yo.

También formas hechas a mano o con cortador como mis florecitas. Es muy importante hacer un agujerito en el centro del pastel para que la masa respire y se cueza bien.

Batimos un huevo con un poco de nata y la pintamos. Espolvoreamos con el azúcar con canela y la metemos al horno.

Primero 10 min a 200º. Veréis que se dora muy rápido, por lo que la cubriremos con papel de aluminio y la seguimos horneando a 160º otros 40min. Ésto no es una ciencia exacta, vosotros conocéis mejor vuestros hornos. Podéis adaptar el horneado. Podéis probar a quitar el calor de arriba y dejar el de abajo para que se haga bien la base. Es ir mirando cómo va la masa. Tiene que quedar doradita y si pincháis la manzana a través del agujero central, ésta debe estar blanda.

Una vez fuera del horno, la dejaremos templar sobre una rejilla. Se sirve directamente en el molde a la mesa, preferiblemente un poco tibia. Pero se puede desmoldar sin problema, una vez fría.

No dejéis de hacer este postre americano. Es apto para casi todos los paladares, desde la abuela a los más pequeños. Otra forma de hacernos comer la fruta a los más renegones ( me incluyo, soy una peste para comer fruta). Muxutxus

Cheesecake Clasíca con Mermelada de Arándanos

Ayer estaba tan cansada que no tuve ganas de editar y poneros esta entrada. El miércoles fue el cumpleaños de mi hermano. Y le hice una tarta Cheesecake Clásica con una salsa de frambuesa que estaba buenísima pero que se desmoronó por el centro nada más cortarla. ¿Por qué? Tengo una teoría, la de los “tres errores”.

Uno: si la receta dice molde desmontable, ¡será por algo!El mío era tan viejuno que hasta tiene algo de roña. Y como había que cocerlo al baño maría, lo descarté y usé uno fijo de 26cm.

Error dos: querer dejarla tiernita en el centro para que estuviera más jugosa, pensando que al enfriar estaría bien cuajada. (a la foto me remito de que no fue así).

Y el último error: pensar que en sólo cinco horas se podía hacer, reposar y enfriar la tarta. Hay que hacerla con más tiempo. Primero se tiene que enfriar antes de meterla a la nevera para que no se raje por arriba. Y necesita por lo menos 3 horas de nevera para que se asiente y compacte.

Y estos son los errores que cometí. Tuve que desmoldarla con un plato, dándole la vuelta como a una tortilla. Y ni tan mal que sólo se quedó un trocito del fondo de galleta en el molde. Estaba hasta entera pero ya se veía que el centro era más bien flan. Y al cortarla se despanzurró la zona del centro. Tampoco ayudó que la salsa de frambuesas fuera fluida, hubiera estado mejor algo más espeso.

Y una que es bastante terca y cabezona no se podía quedar tranquila sin volver a hacerla correctamente. Así que al día siguiente, nada más salir de trabajar, me fui a por un molde nuevo y la volví a hacer. Y la dejé 24 horas enfriando en la nevera. Y éste es el resultado. Una Cheesecake correcta (no puedo decir perfecta). Acompañada de una mermelada de arándanos salvajes.

Para un molde desmontable de 28cm
Para la base:
320gr galletas tipo Digesta (22unid.)
160gr mantequilla
3cucharaditas de azúcar moreno

Para el relleno:
350gr de queso cremoso de untar
250gr de queso de Burgos*
400gr nata 35% M.G
170gr azúcar moreno
6 huevos L
Mermelada de arándanos salvajes para acompañar
*Es cosa mía, lo de sustituir parte del queso cremoso por el de Burgos. Me parecían muchas terrinas de queso. Y además pensé que éste le daría un poco más de textura y cuerpo. Otro día probaré con requesón.

En primer lugar,se pone el horno a precalentar a 180º con calor arriba y abajo. Se trituran las galletas con el método que más os guste (a mazazos o a máquina). Se derrite la mantequilla y se mezcla con la galleta. Se añaden las tres cucharaditas de azúcar y forramos nuestro molde. Veréis que yo pongo el doble de cantidad que otras recetas. Es porque me gusta forrar las paredes laterales y no sólo el fondo. Hay quien lo deja enfriar media hora en nevera. Y quien los hornea 10 min para que endurezca. Yo no hago ni lo uno ni lo otro. Cubro el molde y paso a forrarlo. Primero le plastifico bien la base con film transparente. Y después pongo doble capa de papel aluminio. Es para evitar que se meta el agua del baño María y nos fastidie la base de galleta.

Para hacer el relleno, bato primero los dos quesos con el azúcar. Añado después los huevos uno a uno. Y cuando está todo bien mezclado, echo la nata. Y tal cual al molde. Se hornea 1 hora y cuarto aproximadamente. Para ver si está cuajado el centro, se le da un ligero meneo al molde. Si veis que se mueve mucho la zona centro , dejadlo un poco más, que ése fue el error dos de la otra vez.

Tened en cuenta que necesitáis un recipiente más grande que el molde y con profundidad suficiente para que el agua cubra al menos ¾ partes del molde. Yo uso una cazuela de barro grande.

En cuanto esté, sacadla sin quemaros del baño de agua. Quitar el film y el aluminio y dejadla enfriar sobre una rejilla. Yo la dejé unas 5 horas antes de meterla al frigorífico hasta el día siguiente.

Es fácil de desmoldar. La cubrimos con una fina capa de mermelada y la dejamos que atempere un rato antes de comer. Estará más cremosa y gustosa al paladar.

¿Qué os parece? ¿Me he ganado el aprobado? Esto ya es otra cosa, ¿eh..?

Y preparaos porque tengo por ahí otra más para la colección, una de plátano y Baileys con ganache de Bayleys. Pero tendréis que esperaros...jajaja

 

Cupcakes de Chocolate

Aunque parezca increíble, aún hay gente que no sabe qué es un cupcake. A pesar de que los habrán visto en revistas, en un plano de fondo de alguna película o anuncio. Y de que cada vez que van al super, pasan por delante de unas cajitas que pone “preparado para cupcakes”. Y hablando de preparados, no sé qué ventajas tiene usarlos si hay que añadir huevos, mantequilla, leche.... Con lo sencillos que son de hacer... Para los que aún no os habéis atrevido, os voy a dar las recetas básicas. Hoy la de chocolate y otro día la de vainilla.

He probado muchas recetas pero me quedo con esta de Alma de “Objetivo Cupcake Perfecto”. Seguro que os suena de haberla visto en la tele los domingos en el canal Divinity. Para mí es la Reina de los cupcakes. Y si ella, después de dos mil pruebas elige una receta, yo me fío de ella.
Para 12-14 Cupcakes

(Todos los ingredientes deben estar a temperatura ambiente)
115gr mantequilla sin sal *
120gr azúcar
3 huevos M
180gr harina
40gr cacao sin azúcar
1 cucharadita y media de levadura química
120gr leche
1 cucharadita de extracto vainilla
* (podéis sustituirla por 100gr de aceite suave)

Poner el horno a precalentar a 180º con calor arriba y abajo. Si los hacéis con aceite, podéis hacerlos a mano. Pero con la mantequilla necesitaréis una batidora. Se comienza batiendo la mantequilla con el azúcar (o el aceite) hasta que tengáis una crema. Entonces añadís los huevos, uno a uno. Mientras tamizáis la harina con la levadura y el cacao. Yo suelo ir echando alternadamente cucharadas de polvos y de leche. Y la vainilla en último lugar. Paro la batidora, rebaño bien las paredes con una espátula y le doy un último batido fuerte de 1 min.

Colocamos las cápsulas de papel en una bandeja de cupcakes. Si no tenéis, podéis ponerlas dentro de unas flaneras individuales. Se rellenan hasta 2/3 de capacidad. Es súper cómodo usar un scoop o sacabolas de helado. Pero cada uno que se apañe con lo que tenga. La cuestión es que todas estén igual de llenas para que el horneado sea uniforme. Los metemos al horno de 18 a 20 min. Según el tamaño de vuestras cápsulas puede variar, debéis comprobarlo pinchando con un palillo. Si sale limpio están hechos, si sale un poco manchado, dejadlos un par de minutos mas.

Se sacan del horno y de la bandeja rápidamente. Y se ponen sobre una rejilla a enfriar.

Mientras, limpiamos un poco los cachivaches y las encimeras para hacer tiempo antes de ponernos con la crema. En muchas recetas veréis que le llaman “frosting” o “icing”. Si pone “buttercream”, es una crema de mantequilla. Si pone “ganache”, es una trufa cocida. Si pone “swiss meringue buttercream” o “SMBT”, es una crema de mantequilla de merengue suizo. El “chantilly” es nuestra nata montada. Y por último nos quedan los merengues.

Hoy vamos a hacer una crema de mantequilla chocolate suave.

SOFT CHOCOLATE BUTTERCREAM
250gr mantequilla
250gr azúcar glass extra-fino (icing sugar)
150gr chocolate negro
2 cucharadas de leche

Para hacer la crema es absolutamente necesario una batidora eléctrica. Si tenéis el accesorio pala mejor, si no usaremos las varillas. Derretimos el chocolate en el microondas o al baño maría y dejaremos que se temple un poco. Ponemos la mantequilla, la leche y el azúcar bien tamizado en el bol y ponemos en marcha la batidora en la velocidad más baja primero. Si no, pondréis todo perdido de azúcar. Cuando se esté más o menos mezclado, le subiremos un poco la velocidad y le iremos echando el chocolate derretido poco a poco. Sólo nos queda dejarlo batirse bien un mínimo de 3 min. Cuanto más lo batáis, más cremosa estará. Lo notaréis en su aspecto y en cómo cambia el sonido que hace mientras se bate.

Nos aseguramos de que los cupcakes estén fríos antes de decorarlos o se nos derretirá la crema. Ponemos una boquilla rizada en la manga y la rellenamos por la mitad. Tened en cuenta que con las manos calentamos la crema. Y al principio, por falta de costumbre, se manosea demasiado la manga para hacer fuerza. Si hace calor, incluso os aconsejo que la refrigeréis 20 minutos antes de usarla.

Cubrís los cupcakes con la crema y decoráis al gusto. Podéis poner unos fideos de chocolate, hacer unos hilos con chocolate derretido frío,usar conguitos, lacasitos o lo que queráis. Yo he hecho unas mini tabletas de chocolate. Con un molde súper chulo para hacer bombones.

Podéis buscar en Google inspiración de cómo decorarlos y también hay muchos tutoriales y vídeos que os explican paso a paso como utilizar diferente boquillas.

Cuando yo empecé, leí en muchos sitios que para conservarlos nada de nevera. Es cierto que se queda el bizcocho más secote en la nevera. Pero con sacarlos un ratito antes de comerlos, quedan casi igual de bien. Si hace calor es impensable tenerlos a temperatura ambiente. Se estropea la crema. Pero si no hace mucho calor, podéis guardarlos en una lata o en un plato con campana. Para evitar que les dé el aire y los reseque. Se pueden congelar, aunque el resultado nunca será el mismo. Pero es una buena opción si no queréis hartaros a comer. Que con lo que vale el recibo de la luz, no es plan encender el horno para hacer media docena. Más vale planificarse y ya puestos, hacer alguna lasaña, pizza o asado al horno.

Y no os preocupéis si no salen perfectos a la primera, por algo se empieza. Y de todos los fracasos se aprende algo para mejorar. Y si tenéis dudas, ya sabéis cómo encontrarme. Muxutxus